Víctor González (IES Odra - Pisuerga) nos cuenta cómo fue su tercera observación (en realidad se tuvo que sustituir por una videoconferencia) con su profesor experto Rubén Infante (IES Octaviano Andrés):
Lamentablemente por la situación que nos ha tocado vivir, la tercera observación no la pude realizar de forma presencial y durante la última semana de abril y las dos primeras semanas de mayo me mantuve en contacto con Rubén Infante, Jefe del Departamento de EF y de la Comisión Bilingüe de IES Octaviano Andrés, para compartir la experiencia de impartir Educación Física a distancia.
Realizamos varias llamadas telefónicas para compartir la forma de trabajar con nuestro alumnado durante este periodo de confinamiento e intercambiamos varios emails intercambiando documentación, enlaces y material que estábamos utilizando. Se puede decir que en el mismo proceso juntamos la tercera observación por mi parte y la que podría haber hecho él visitándome a mí.
Ambos coincidimos en la necesidad de que nuestro alumnado se mantuviera activo durante el periodo de confinamiento, pues ya no solo es el hecho de estar en casa sin poder salir o de que normalmente ocupen su tiempo de ocio sentados jugando con videoconsolas, si no que anticipábamos que el resto de materias propondrían una gran cantidad de tareas que obligarían al alumnado a pasarse muchas horas delante del ordenador.
Por su parte, les propuso diferentes entrenamientos mediante un manual de la revista SportLife y videos de Youtube con rutinas y todos los días debían cumplir con 1 hora de ejercicio físico. En un calendario anotaban el entrenamiento y debían enviar evidencias de haber realizado la actividad mediante fotografías, videos o reflexiones escritas.
Por mi parte, propuse algo similar agrupando videos de Youtube de diferentes categorías de entrenamiento en una presentación genial.ly a la que denominé "NEFLIX". Asimismo, debían aportar evidencias de haber seguido dichos entrenamientos mediante la grabación de videos time-lapse (a cámara rápida), videos y capturas. Fui menos exigente que Rubén y solo les pedía un entrenamiento a la semana y máximo tres, pero porque planteé un proyecto trimestral denominado "Cada día 1 más" en el que debían realizar durante al menos 15 días seguidos (y máximo 45 días) una misma rutina de entrenamiento a la que cada día añadir una repetición más. Siendo fácil al principio y más exigente según van pasando los días.
Ambos coincidimos en que el alumnado debía intentar que más miembros de su familia les acompañaran en los entrenamientos, valorando muy positivamente que así lo hicieran.
Con el paso de los días y las medidas de desescalada y dado que las poblaciones de Valderas y Melgar de Fernamental podían pasar antes a FASE 1 y por contar con menos habitantes ya podían salir al exterior sin horarios restrictivos, ambos les ofrecimos al alumnado la posibilidad de hacer ejercicio al aire libre. Por mi parte podían registrar sus salidas de carrera, montar en bici, patines o andar mediante cualquier app con gps. Por su parte, Rubén trabajó con la app Strava creando una comunidad privada del IES Octaviano Andrés, de modo que tanto él como los compañeros de clase podían ver lo que hacía cada alumno. Como ya había trabajado durante el primer trimestre con dicha app y metodología, le fue fácil ponerla en práctica. Me parece muy interesante y seguramente lo ponga en práctica para el próximo año.
Además de registrar los entrenamientos, Rubén les propuso un trabajo de seguimiento de la frecuencia cardiaca, empezando por un registro de la frecuencia cardiaca de reposo durante 5 mañanas seguidas recién levantados y terminando con la toma de pulsaciones tras realizar diferentes ejercicios físicos de menor a mayor intensidad. Finalmente registraban las pulsaciones en una gráfica y respondían a varias preguntas. Tomando su idea, propuse a mis alumnos algo parecido y dentro de un proyecto trimestral "Cada día 1 más", comentado anteriormente, también tenían que tomarse las pulsaciones antes de empezar, al finalizar y 1 minuto tras la finalización, para trasladar dichos resultados a una gráfica y reflexionar sobre el comportamiento y evolución de su frecuencia cardiaca durante el periodo de entrenamiento.
Evidentemente nuestra materia tiene un mayor peso práctico que teórico, pero no por ello dejamos de trabajar dichos contenidos. Por su parte, Rubén se centró en repasar y reforzar aspectos explicados y trabajados en clase durante los dos primeros trimestres mediante cuestionarios en Kahoot y por mi parte, utilicé la app Flipgrid, mediante la cual el alumnado puede grabar video-respuestas de un tiempo determinado sobre preguntas teóricas prácticas.
En definitiva, el planteamiento inicial de nuestras clases virtuales de Educación Física fue bastante similar desde el comienzo del trimestre y sin haberlo compartido desde un principio. Este hecho, ha permitido por mi parte haber implementado algunas de las tareas que Rubén proponía a su alumnado y que no trastocara la dinámica de mí metodología durante este periodo de confinamiento.
De nuevo, y como ocurrió con las dos primeras visitas presenciales, compartir las experiencias en esta situación nueva para todos, ha vuelto a ser algo muy enriquecedor y que no dejaré de hacer en el futuro, manteniendo el contacto con mi profesor experto y dejando la puerta abierta a volver a participar en el proyecto en próximas convocatorias.